En una cuenta que tiene a infinito por los escándalos, Justin tuvo que hacerse cargo de un problema que tuvo con su mascota hace mucho tiempo. Cuando viajó junto a Mally a Alemania en marzo de 2013, sin ocuparse antes del papeleo necesario ni cumplir con todos los trámites veterinarios y las vacunas.
Tal hecho provocó el enojo de las autoridades de ese país, por lo que Bieber eligió abandonar al mono en lugar de facilitar a los agentes aduaneros los documentos necesarios. Por eso, el intérprete tuvo que abonar casi $11 mil dólares para cubrir la multa por viajar con un animal indocumentado, además de los gastos de la estancia del primate en un albergue animal.