Con todo el glamour que la caracteriza como cantante pop con aires de rock star, la mexicana Paulina Rubio convirtió en una fiesta íntima el espectáculo que ofreció la noche del miércoles en Buenos Aires, donde presentó en vivo los temas de su última placa "Gran City Pop".Acompañada por cuatro músicos y dos coristas-bailarines, la ex integrante del grupo Timbiriche hizo un repaso de sus grandes éxitos e interpretó las canciones que componen su más reciente álbum producido por el argentino Cachorro López, autor de algunas de las canciones de esa placa.
"Bienvenidos, están aquí, vamos despiértense!", instó la blonda cantante mexicana al público que se dio cita en el teatro Gran Rex, después de haber abierto su show con "Algo de ti", canción que forma parte de su nuevo material editado en 2009. Luego llegaron "Ni una sola palabra" y "Lo haré por ti".
Vestida con una chaqueta negra con botones dorados, botas por encima de la rodilla, portaligas y un pantalón corto, guantes y anteojos al tono, Paulina Rubio ofreció un recital con todos los matices que hicieron que sus fans cantaran a la par de ella y saltaran en cada una de sus interpretaciones.
"Buenas noches, bienvenidos al City Tour, están listos… voy a cantarles uno de mis clásicos y está dedicado a las mujeres del siglo pasado", continúo la artista a modo de introducción de "Yo no soy esa mujer" y con el fin de avivar a sus seguidores, que respondieron con aplausos y ovaciones.
Mientras los bailarines realizaban una especie de tango moderno, Rubio aprovechó la ocasión para hacer un cambio de vestuario y regresar con "Ultimo adiós", para luego brindar con tequila y convidar un vaso grande lleno de esta bebida típica mexicana a algunas personas sentadas cerca del escenario antes hacer "Dame otro tequila".
En tanto, en las tres pantallas rectangulares que adornaban el escenario se proyectaban imágenes de la mexicana, y entre medio de un imponente set de luces, Rubio continuó con su espectáculo y aprovechó, además, para saludar y enviarle un beso a Cachorro López antes de arremeter con su nuevo tema "Ni rosas ni juguetes".
Luego siguieron "Nada puede cambiarme", "Algo tienes" y, ya un poco más tranquilo después de esos temas movidos, "Melodía de tu alma" -canción que según dijo compuso "para esta nueva etapa" de su vida.
Exigente con ella misma, la artista le regaló a su público un poco más de intimidad y decidió desplazarse por los laterales del escenario para cantar alguna canción a pedido de los presentes, quienes se deleitaron con un popurrí improvisado.
"Vamos a hacer de cuenta que estamos en el salón de casa", dijo la cantante, quien era escoltada por algunos de sus músicos mientras se desplazaba por una de las escalinatas laterales del teatro para así entonar "Nada fue un error" y luego seguir hacia el otro costado e interpretar "Baila casanova" y "Causa y efecto".
Ya para el tramo final, la mexicana hizo "A contra luz" y el tema en inglés "Don't say goodbye", el mismo que sirvió para presentar a cada uno de sus músicos, que aprovecharon para hacer sus respectivos solos.
Tras un nuevo cambio de vestuario (un vestido y un saco violeta de lentejuelas) y luego de haber abandonado el escenario, Paulina regresó para hacer los bises de "Causa y efecto", "Yo sigo aquí" y despedirse finalmente después de un poco menos de una hora y media de show con "Te quise tanto".
Paulina Rubio se marchó así entre fuertes aplausos por parte de su público y ahora tiene previsto continuar con su gira, cuando se presente hoy en el Hotel Conrad de Punta del Este, Uruguay.
