
Algo que puede ser medianamente aceptado en el caso de un recital exclusivo de la banda, pero que se convierte en un grave problema cuando se trata de un festival que incluye un cartel de más artistas. Una situación que quedó en evidencia en las últimas presentaciones de la banda en dos festivales ingleses: Reading y Leeds.
Los problemas comenzaron en “Reading” el 27 de agosto, donde Axl Rose y compañía salieron a escena una hora más tarde de lo previsto. Al pasarse media hora de lo estipulado, los organizadores decidieron “desenchufar” los instrumentos y un rabioso cantante no encontró nada mejor que terminar la presentación usando un megáfono.
El bochornoso incidente parece que no sirvió de lección porque días después en el Festival “Leeds”, la agrupación llegó media hora más tarde y al final de la primera parte del show, Axl Rose comenzó a decirle al público que los organizadores querían dar por terminado su concierto.
Luego de la polémica, Axl Rose ha dicho en Twitter que existía un acuerdo con los organizadores de los festivales para extenderse de la hora y que por falta de información o un cambio de parecer pasó lo que pasó. Algo que es desmentido por el productor Melvin Benn, quien aclara que ese acuerdo nunca existió, según cuenta la revista musical NME.