Aunque antes de la ceremonia celebrada este domingo en T-Mobile Arena, de Las Vegas, Nevada, el intérprete afroamericano ostentaba el máximo número de nominaciones con 19, al final se fue a casa con ocho galardones, incluyendo Artista Top Hot 100 y Canción Top Streaming por “The Hills”. Fue la británica Adele quien le arrebató el máximo galardón de la noche a Artista del Año, con el que sumó cinco trofeos, de los ocho por los que competía y entre los que se incluyeron Álbum Top Billboard 200.
Los máximos perdedores de la entrega fueron Justin Bieber y Taylor Swift, quienes figuraban en 12 y ocho categorías, respectivamente. Si embargo al término de la ceremonia Bieber sólo obtuvo dos, Artista Top Maculino y Artista Top Social Media, mientras que Taylor sólo uno: Mejor Artista Tour. Durante las tres horas que duró, la premiación fue lo que menos lució, pues los momentos de la noche fueron de los números musicales, 20 en total, en comparación con los 10 premios que entregaron en la transmisión en vivo conducida por Ludacris y la cantante y modelo Ciara.
La noche fue emotiva y llena de homenajes, como el que cerró la ceremonia con Madonna, quien a manera de reconocimiento póstumo interpretó dos temas del desaparecido Prince. La Reina del Pop salió al escenario vestida con un traje púrpura con motivos psicodélicos, para rendir tributo a su amigo, lo que provocó reacciones encontradas entre sus fans, en su mayoría halagos y algunas críticas.
El encaje, la brillantina y el glam no pudieron faltar en el escenario ni en las gradas, pues con pulseras con luz púrpura, los asistentes formaron un manto estrellado, al compás de las estrofas de “Nothing compares to you”, tema que escribiera el artista de Minneapolis, pero que hiciera famoso la voz de Sinéad O’Connor. Luego, Madonna se hizo acompañar por Stevie Wonder para interpretar “Purple rain”, canción que le diera varios apodos Prince y con los que se le conoció hasta sus últimos días.
Antes del emotivo cierre, ya habían presentado otros tributos, comenzando con el que se autorindió Britney Spears, quien abrió la premiación con un pequeño número que incluyó algunos de sus más grandes éxitos y que presenta actualmente en Las Vegas.
Lo mismo hizo Celine Dion, quien además de interpretar un par de temas recibió el Premio Al Icono, el cual recibió de manos de su hijo René-Charles, momento en el que no pudo disimular su emoción y comenzó a llorar y agradecer a su familia, amigos y a su recién fallecido esposo, de quien dijo, siempre cuidará de ella. Tras la polémica que enfrenta Kesha contra su productor Dr. Luke y que casi impidió que actuara esta noche, la rubia complació con un homenaje a su ídolo Bob Dylan con “It, ain´t me”.
